El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, garantizó hoy en la capital burgalesa el compromiso del Gobierno de Castilla y León con “los recursos económicos necesarios” a la Universidad de Burgos (UBU) para la implantación del grado de Medicina el próximo curso académico 2026-2027, así como a todas las universidades, independientemente de la aprobación de los presupuestos generales de la Comunidad. Si bien, reconoció que “sería mucho más fácil con el presupuesto de la Junta de Castilla y León”.
Fernández Mañueco insistió en que desde el Gobierno de Castilla y León se “garantiza” el compromiso con los recursos económicos necesarios a la Universidad de Burgos y a todas las universidades. Lo dijo durante su comparecencia acompañado por el rector de la UBU, José Miguel García, al término de la reunión que mantuvieron, en la que reafirmó el compromiso del Gobierno autonómico con la implantación del grado de Medicina, con una oferta de 72 plazas anuales de nuevo ingreso.
Preguntado acerca de la inversión inicial que se maneja para la financiación del primer curso académico del nuevo grado de Medicina en la UBU, Fernández Mañueco recordó que se trabaja en la actualidad en un proyecto de reforma del edificio del Hospital Divino Valles, que será la Facultad para acoger estos estudios universitarios.
“Una vez que tengan terminado el proyecto de reforma, tendremos una reunión, tanto con la Universidad de Burgos, la Universidad de León, el resto de universidades, y hablaremos del futuro”, declaró el presidente, y aseveró que el Gobierno de Castilla y León estará “a la altura de esta nueva exigencia”.
Alfonso Fernández Mañueco comenzó su intervención aplaudiendo la labor de la UBU, a la que tildó como una universidad “dinámica”, que destaca en los rankings de investigación, y que también es “muy pujante en patentes y en publicaciones científicas de alto impacto”, y que, sobre todo, “tiene una gran proyección”. Por eso, ensalzó que es “una institución de la que estamos todos muy orgullosos y seguimos apoyando con fuerza para que siga alcanzando importantes logros de futuro”.
En esta línea, recordó que en la apertura del pasado curso académico en Castilla y León, anunció en el campus burgalés “liderar el consenso” entre las cuatro universidades públicas para implantar distintos grados sanitarios y el grado de Medicina en la Universidad de León y en la Universidad de Burgos.
Así, el jefe del Ejecutivo autonómico sostuvo que desde el Gobierno de Castilla y León “se ha estado a la altura” de las dos universidades citadas, pero, sobre todo, resaltó, “de esa ilusión colectiva que había despertado en la ciudad de Burgos y en toda la provincia y la sociedad burgalesa”.
Mañueco destacó que se trata de un proyecto de gran exigencia técnica y académica en el que la UBU avanza con paso firme y con el apoyo decidido de la Junta de Castilla y León, y subrayó que el plan de estudios de Medicina se encuentra ya en trámite ante la Agencia para la Calidad del Sistema Universitario de Castilla y León, que emitirá su primer informe en el mes de diciembre.
Confía en que el informe será “positivo”
En este sentido, señaló que “no le cabe la menor duda de que ese informe será positivo”, y de que en el curso 2026-2027 empezará el curso del grado de Medicina en la UBU. “Desde el respeto más absoluto a la autonomía universitaria, seguiremos acompañando a la Universidad de Burgos para dotarse de los profesores necesarios, de las infraestructuras necesarias, y que esto sea una realidad en el curso 2026-2027”, expuso.
Mañueco aseguró que la reunión de trabajo fue “fructífera” y avanzó que “en las próximas semanas y meses iremos dando detalle, tanto de los profesores como de las infraestructuras”. Así, recalcó que la Junta “pone a disposición de la universidad todas las instalaciones, todos los centros asistenciales de Sacyl”, que son, dijo, “imprescindibles para desarrollar un grado de estas características y para que los alumnos puedan realizar las prácticas con total normalidad”.
“Estamos a disposición para que de manera inmediata puedan realizarse las adaptaciones necesarias para que sea una realidad el inicio del curso el año que viene y dotar de las infraestructuras necesarias en el edificio Divino Valles, que es el elegido para implantar la Facultad de Medicina”, exclamó.
“En nuestra tierra somos gente donde nos gusta poco el ruido, nos gustan más los resultados, más los frutos, las nueces”, afirmó, y agregó que Burgos va a contar con unos estudios de Medicina “de calidad y excelencia”, y consideró que “con lo que se nos ha trasladado una perspectiva novedosa para dar respuesta a las necesidades de nuestro entorno”.
Sistema universitario público “cada vez más potente y atractivo”
Con las nuevas titulaciones universitarias, Fernández Mañueco destacó que “se refuerza un sistema universitario público cada vez más potente y atractivo” en la Comunidad. “Es un hito crucial en la legislatura de talento”, resaltó. Así, manifestó que la Junta sigue fortaleciendo el sistema universitario de la Comunidad, con la reducción de tasas, el aumento de becas, la incorporación de nuevas titulaciones y una financiación un 27 por ciento superior, que supone 100 millones de euros adicionales cada año.
Castilla y León se consolida, subrayó, entre las tres comunidades autónomas con mayor capacidad de atracción de estudiantes universitarios, superando ya los 100.000 alumnos matriculados, al mismo tiempo que recordó el compromiso de la Junta de Castilla y León con la investigación universitaria y biosanitaria, y puso como ejemplo la creación del Instituto de Investigación Biosanitaria de Burgos.
Memoria de Medicina
Por su parte, el rector de la UBU recordó que la memoria del grado fue remitida a la Agencia de Calidad del Sistema Universitario de Castilla y León (Acsucyl) para su estudio y aprobación. En dicho documento, entre otros apartados, se refieren los medios materiales y de infraestructuras necesarias para la implantación del grado, que se ubicará en las plantas baja, 5ª, 6ª, 7ª y 8ª del Hospital Divino Valles, y que contará también con un “icónico acceso lateral”, así como el plan de estudios de una titulación muy regulada por los estándares europeos y en el que destaca su apuesta por las tecnologías médicas, la inteligencia artificial, la investigación biomédica, la terapia celular y la medicina personalizada, así como por la formación de médicos en el ámbito de la asistencia primaria.
El grado en Medicina de la UBU presenta una muy alta carga práctica, especialmente desde el tercer curso en sus materias con mayor componente de experimentalidad, en las que el reparto de la docencia práctica asciende hasta el 75 por ciento frente al 25 por ciento de las clases teóricas, fijándose en estas asignaturas un modelo de enseñanza de grupos reducidos de nueve alumnos.
