Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de Segovia, denunciaron a dos personas por matar a un corzo sin autorización en la localidad segoviana de Yanguas de Eresma y, más tarde, localizaron el cuerpo del animal en la zona de la antigua estación de tren del municipio.
El Seprona recibió aviso del Centro Operativo de la Comandancia de Segovia de la llamada de un ciudadano que alertaba de que dos personas habían disparado a un corzo y lo habían matado, cerca del núcleo urbano del barrio de San Pedro. Los autores, al ser sorprendidos por el alertante, abandonaron rápidamente el lugar en un vehículo, y dejaron allí al animal abatido.
En este sentido, se movilizaron varias patrullas que lograron interceptar al todoterreno. Estaba ocupado por dos personas, que portaban en los asientos traseros un rifle de caza desenfundado con mira telescópica, un visor térmico, un visor nocturno, así como diferentes útiles de caza. Registrado el vehículo, en su maletero se localizó un ejemplar de corzo macho abatido de un disparo con el precinto colocado en sus cuernas.
Acto seguido se desplazó a la zona una patrulla del Seprona, que encontró el cadáver de un corzo macho con un orificio de bala entre el pasto existente, a escasos 100 metros de las últimas casas y dentro de un coto privado de caza. Así, y realizadas las correspondientes gestiones, se comprobó que la persona que conducía el todoterreno estaba autorizado para cazar un corzo macho, para lo que disponía del correspondiente precinto. Sin embargo, no disponía de autorización para la caza del segundo animal abatido.
Los agentes incautaron al corzo cazado ilegalmente, así como el rifle utilizado y los dos visores que portaban (térmico y nocturno). Se formuló la denuncia correspondiente que se remitió al Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León de Segovia, por la comisión de las infracciones a la ley de caza y gestión sostenibles de los recursos cinegéticos de esta Comunidad Autónoma, correspondientes a la caza de un corzo macho careciendo de autorización, portar dispositivos auxiliares prohibidos durante la caza y disparar desde una zona de seguridad, como es una vía de comunicación.