El Partido Animalista PACMA condenó hoy “rotundamente” la matanza de dos lobos en la localidad leonesa de de Lois, en el municipio de Crémenes, cuyos cadáveres fueron hallados en un coto de caza privado de la localidad, desollados y decapitados después de haber sido abatidos a tiros durante una cacería de jabalíes.
María Hernández, integrante de la formación, consideró que estos hechos suponen “una evidencia de la necesidad de mantener e incluso reforzar la protección de los lobos tanto en España como en el resto de Europa, lejos de la pretensiones de Bruselas acerca de rebajarla”.
Actualmente, esta especie se encuentra incluida en el Listado de Especies en Régimen de Protección Especial, lo que impide su control cinegético excepto en ocasiones puntuales y justificadas. Sin embargo, PACMA apuntó a una “necesidad imperiosa de ofrecer una protección total y sin excepciones al lobo”, por lo que exigió a la Junta de Castilla y León que trabaje para que así sea.
Desde PACMA señalaron que el respeto a la fauna salvaje es una cuestión “enteramente educativa», ya que “el nivel de protección al que se somete a una especie es decisivo, pero depende del grado de concienciación de la sociedad civil el que no se produzcan actos de barbarie como los que estamos viendo con los lobos”.
Así, para el Partido Animalista, la caza incentiva a la comisión de este tipo de delitos, de forma que “que una persona pueda optar a tener una licencia de armas es venderle una papeleta para que acabe haciendo su propia gestión a conveniencia, sea legal o no”.
Por todo ello, el partido, que teme que los dos ejemplares “no sean los únicos muertos en esta batida de caza”, pidieron una investigación para esclarecer los hechos y «medidas contundentes» a la hora de depurar responsabilidades sobre la muerte de estos animales, ya que, a pesar de que sí han habido muertes, «no han habido condenas por caza de lobos después de su integración en el Lespre».