El candidato del PSOE a la presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez, fracasó este domingo en la primera votación de investidura celebrada en el Congreso de los Diputados al no conseguir la mayoría absoluta de 176 escaños que exige la Constitución española.
Sánchez logró 166 votos a favor, 165 en contra y 18 abstenciones pero no logró sacar adelante la investidura porque el artículo 99.3 de la Constitución obliga en primera votación a ser elegido con mayoría absoluta de 176 escaños. Además, hubo una ausencia de la diputada de Unidas Podemos Aina Vidal al encontrarse enferma.
No hubo sorpresas en el resultado, pues votaron a favor de la investidura los 120 diputados del PSOE, 34 de Unidas Podemos, 6 del PNV, 2 de Más País, 1 de Comprómís, 1 de Nueva Canaria, 1 del BNG y 1 de Teruel Existe. En contra votaron los 88 del PP, 52 de Vox, 10 de Ciudadanos, 8 de Junts, 2 de Navarra Suma, 2 de la CUP, 1 de Coalición Canaria, 1 de Foro de Asturias y 1 del Partido Regionalista de Cantabria. Por su parte, se abstuvieron los 13 representantes de ERC y 5 de EH Bildu.
Al fracasar la investidura este domingo, el Pleno del Congreso volverá a reunirse el martes 7 de enero a las 12.45 horas para celebrar una segunda votación en la que Sánchez sí conseguirá ser investido presidente del Gobierno si gana la votación por mayoría simple de un voto más a favor que en contra. Entonces, le valdrá el mismo resultado de este domingo e incluso contará con uno más porque Unidas Podemos asegura que entonces sí vendrá a votar su diputada Aina Vidal pese a estar enferma.
La votación de este domingo comenzó sobre las doce y cuarto de la mañana después de que finalizaran las intervenciones de todos los grupos parlamentarios, que han tenido un día para responder al programa de gobierno que expuso Sánchez en la mañana del sábado al empezar el debate de investidura.
La presidenta del Congreso, Meritxell Batet, explicó que la votación sería “pública por llamamiento” y solicitó a los diputados que dijeran de pie y en voz alta el sentido de su voto (sí, no o abstención) para que se escuchara bien, aunque los secretarios de la Mesa de la Cámara Baja se encargaron a continuación de repetirlo para evitar equívocos.
La votación comenzó por sorteo con la diputada de Unidas Podemos Mar García Puig y prosiguió por orden alfabético con todo el Hemiciclo. Los últimos en votar, como es habitual, fueron los miembros del Gobierno de España que tienen escaño y los integrantes de la Mesa del Congreso.
Quinta votación perdida
Esta votación de investidura es la quinta que pierde Pedro Sánchez tras las dos investiduras anteriores a las que se sometió en marzo de 2016 y en julio de 2019. En ambos casos el candidato del PSOE perdió las cuatro votaciones, dos por investidura. En la de 2016 decayó su candidatura con apenas 131 votos a favor (PSOE, Cs y Coalición Canaria) y en la segunda del pasado verano con 219 en contra (PP, Podemos, ERC, PNV, Bildu, PDECat).
Las derrotas en esas dos investiduras no valieron a Sánchez para obtener mandato parlamentario para llegar a La Moncloa pero sirvieron para activar el procedimiento contemplado en el artículo 99 de la Constitución y repetir elecciones generales meses después.
En la nueva votación que el Congreso de los Diputados celebrará el martes se prevé que Pedro Sánchez sí consiga sacar adelante la investidura al contar con más votos a favor que en contra. Para ello, Batet anunció formalmente la convocatoria del Pleno para las 12.45 horas del 7 de enero con el objetivo de reiniciar el debate y llevar a cabo otra votación en la que será suficiente la mayoría simple.