La Comisión Europea propuso hoy al Consejo de la Unión Europea reducir el nivel de protección del lobo, y clasificarlo como animal “protegido” y no como “estrictamente protegido”, tal y como se encuentra en estos momentos. Esta decisión llega después que diferentes administraciones estatales y regionales, como la Junta de Castilla y León, se quejaran a Bruselas del incremento de este animal salvaje y el aumento de los problemas que provocaba.
En este sentido, el comunicado emitido por el ejecutivo comunitario destaca que el regreso de los lobos a regiones de la UE en las que habían estado ausentes durante mucho tiempo y el aumento de sus poblaciones en nuevos territorios ha provocado un crecimiento del registro de “ataques al ganado y conflictos con agricultores y cazadores”.
En la misma línea se expresó la presidenta de la Comisión Europea, la conservadora Ursula von der Leyen, quien constato que “la reaparición de los lobos es una buena noticia para la biodiversidad en Europa”. Sin embargo, destacó que “la concentración de manadas de lobos en algunas regiones europeas se ha convertido en un peligro real”.
“Para gestionar más activamente las concentraciones críticas de lobos, las autoridades locales han venido pidiendo más flexibilidad. El nivel europeo debe facilitarlo y el proceso que la Comisión ha iniciado hoy es un paso importante. Estoy profundamente convencido de que podemos encontrar y encontraremos soluciones específicas para proteger tanto la biodiversidad como nuestros medios de vida rurales», añadió la presidenta del ejecutivo comunitario.
El informe que publica este miércoles Bruselas estima que hay más 20.000 lobos actualmente en toda la Unión Europea, y que se prevé que esta cifra vaya aumentando y que las manadas se vayan expandiendo por todo el territorio comunitario. Hoy en día, ya hay lobos y manadas reproductoras en 23 estados miembros, según el estudio de la Comisión Europea.
Por este motivo, el ejecutivo comunitario reivindica las políticas públicas que han permitido este “éxito de conservación”. Ahora bien, eso no quita, según Bruselas, que una vez se ha alcanzado estos niveles poblacionales del lobo se pueda “adaptar su estatuto jurídico de protección” a su situación, que es mucho mejor a la de hace unos años.
Esta propuesta legislativa tiene que ser validada por el Consejo de la Unión Europea, donde se encuentran representados los 27 países del bloque comunitario. El objetivo de la iniciativa es permitir una mayor flexibilidad de gestión por parte de las administraciones estatales y regionales, sin dejar de lado la protección de la fauna y medio ambiente del territorio comunitario.