Con el montaje de la estructura de andamios y elevador comienza la restauración en las cubiertas del cuerpo superior de la girola y el transepto norte de la Catedral de Segovia. Con el visto bueno de la Comisión Territorial de Patrimonio Cultural, las obras de conservación proyectadas tienen como objetivo solventar los problemas de estanquidad y filtraciones recurrentes a consecuencia de desplazamientos de las tejas y meteorización de la capa de compresión.
Según explicaron desde el Cabildo, se levantará la cobertura de teja afectada por la humedad y el mortero de agarre para proceder a la incorporación, en la propia configuración constructiva, de material aislante e impermeabilizante. Desde el punto de vista técnico se trata de una obra destinada a las labores propias de mantenimiento sin que vaya a ser modificado ningún aspecto ni volumetría del espacio, un total de 580 metros cuadrados.
Durante la intervención, que llevará a cabo la empresa Barzabales durante cuatro meses, está prevista la rehabilitación de las tres mansardas, ventanas destinadas a ventilar e iluminar dispuestas sobre el tejado, a través de su forrado con zinc titanio de acabado natural. Uno de los motivos del estado de conservación actual son las filtraciones en los laterales entre cubiertas y muros del cimborrio, como igualmente ocurre con los parámetros verticales de las mansardas, al no estar bien cerrados.
Además, se colocarán remates laterales, también de zinc, en el encuentro con los muros que amortigüen la caída de restos y materiales desde el cimborrio, de la misma manera que se resolvió en la actuación de la cubierta de la nave central en 2014.
Con el objetivo de mantener unas condiciones estables en las cubiertas y bajo cubiertas a largo plazo, se repondrán las maderas levantadas, instalará una capa impermeabilizante del tipo delta-drain, y por último, la aplicación de una segunda capa de mortero de cemento armado con tela de gallinero. El retejado contará con el empleo de teja cerámica vieja colocada a la manera tradicional segoviana.
En el desarrollo de este proyecto de intervención se han tenido en cuenta las condiciones extraídas del Plan Especial de las Áreas Históricas de Segovia, al que está suscrito la Catedral. El Cabildo, administrador del templo y responsable de todas las obras en el conjunto, es el responsable de conservar cada uno de los espacios, prestando especial atención a las cubiertas y su correcto estado.
Esta intervención supone la primera fase del proyecto de conservación de las estructuras de cubiertas de la cabecera. Las siguientes abordarán el segundo y primer nivel de los tejados de esta parte icónica de la Catedral. Una vez terminadas, habrá finalizado la intervención en el conjunto de cubiertas, siendo la más importante la realizada en 2014 en la nave central y las del lado de la epístola y del evangelio.