La comunidad empieza a “desacelerar” y crece un 1,8% en el tercer trimestre frenada por la agricultura y la industria

Carriedo destaca que seguimos creciendo y entre enero y septiembre el dinamismo alcanzó el 2,8%, frente al 2,6% de España y el 0,5% de ella UE

La economía de Castilla y León creció un 1,8 por ciento en el tercer trimestre del año, dos décimas menos que en el trimestre anterior, y lejos del 4,6 por ciento del primer trimestre del ejercicio, lo que refleja que “se ha desacelerado en alguna medida el ritmo de crecimiento”, reconoció hoy el consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo.

El consejero portavoz presentó hoy los datos de la Contabilidad Regional del tercer trimestre del año, y remarcó, no obstante, que entre enero y septiembre, el crecimiento acumulado fue del 2,8 por ciento, por encima del 2,6 por ciento de España, y muy por encima del del 0,5 por ciento de la UE, y del 0,6 por ciento de los países de la zona euro. En la variación trimestral, la Comunidad avanzó un 1,8 por ciento, al igual que España, y por encima del 0,1 por ciento de la UE y la zona euro.

 

 

“Estaba prevista esta desaceleración”, dijo, para resumir que Castilla y León “sigue creciendo y de forma relevante” aunque “en la parte negativa se aprecia una desaceleración”. Precisó el consejero que los sectores que más contribuyeron al dinamismo el tercer trimestre del año fueron la construcción y los servicios, con avances del tres y 2,8 por ciento, respectivamente. Sin embargo, la industria sigue creciendo pero a menor ritmo que en otros trimestres, con un 0,5 por ciento (2,4 por ciento en el segundo y 7,7 por ciento en el primero), pero “estamos entre las tres autonomías”, dijo, con mayor dinamismo, aunque “se aprecia desaceleración”. Carriedo resaltó que el peor dato se produjo en el agrario, que ya bajó en 2021 y 2022, y a consecuencia de la cosecha “especialmente negativa en volumen y precio”, sufrió una caída del 8,5 por ciento.

En este contexto, Carlos Fernández Carriedo ensalzó que la Comunidad “sigue creciendo a buen ritmo”, cinco veces por encima de la media europea, y aunque se prevé que en el cuarto trimestre el dato será “al inferior” al del tercero, se cerrará el ejercicio “en todo caso por encima de la previsión inicial” de la Junta del 1,6 por ciento.

En cuanto a la previsión para 2024, asumió que ante el deterioro que está sufriendo la economía, los datos se parecerán “más” a los del cierre de este año, aunque confió en que no se verá un “dato tan negativo” en el sector primario. “La desaceleración se mantendrá en 2024”, dijo.

Carriedo también valoró los datos de paro conocidos hoy, y se felicitó porque en la comparación interanual, el desempleo se reduce en Castilla y León, tres puntos más que la media, un ocho por ciento, frente al cinco por ciento nacional, lo que “es coherente con el dato de crecimiento económico”, sentenció.

 

Demanda

El informe del departamento de Carlos Fernández Carriedo expone asimismo, que la economía registró una menor contribución positiva de la demanda interna al crecimiento del PIB, que pasó de 1,8 a 1,5 puntos porcentuales en este trimestre, ante las “dificultades de las familias para llegar a fin de mes”.

El gasto en consumo final creció un 1,2 por ciento en este tercer trimestre, menos que en el trimestre anterior (1,4 por ciento), resultado del menor aumento del gasto de las Administraciones Públicas (2,4 por ciento frente al 3,1 por ciento del anterior periodo) y del mantenimiento del crecimiento del gasto en consumo final de los hogares en este trimestre (0,7 por ciento).

En cuanto a la formación bruta de capital (inversión), Carriedo remarcó que anotó una variación del 2,6 por ciento en este trimestre, inferior al periodo precedente (3,2 por ciento), donde crecieron tanto la inversión en bienes de equipo como la de construcción. La inversión en bienes de equipo aumentó un 2,1 por ciento interanual, en menor medida que en el trimestre anterior (3,5 por ciento). Por su parte, la inversión en construcción registró en este trimestre un incremento del 2,9 por ciento (igual que en el periodo anterior).

El sector exterior presentó una contribución positiva de 0,3 puntos al crecimiento del PIB en el tercer trimestre del año (0,2 puntos en el periodo anterior), con una desaceleración de las exportaciones totales (del 2,2 al 1,6 por ciento en este trimestre) y de las importaciones totales (del 1,7 al 1,1 por ciento en el tercer trimestre)

Por último, los datos difundidos por la Consejería de Economía y Hacienda ponen de relieve que el número de puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo descendieron un 0,2 por ciento en el tercer trimestre del año. En concreto, aumentaron un 10,5 por ciento en la construcción y un tres por ciento en la industria, pero mermaron un cuatro por ciento en el primario y un 1,4 por ciento en los servicios.

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