La implantación de la jornada laboral de 35 horas semanales en la Junta de Castilla y León será una realidad el 1 de junio, después de que CCOO, UGT y CSIF hayan logrado alcanzar un acuerdo con el Ejecutivo autonómico, que -según un comunicado conjunto de los tres sindicatos- también respeta las mejoras laborales que los empleados públicos habían logrado en los últimos años y que se ignoraban o se vulneraban en las propuestas iniciales que habían presentado las diferentes consejerías en las mesas sectoriales. Por lo tanto, los trabajadores de la Administración General de la Junta mantendrán las condiciones actuales de flexibilización de la jornada, que favorecen la conciliación de la vida familiar y laboral.
En el caso de Educación, se respeta la compensación de horas cuando haya exceso de horas lectivas. Además, se continúa exigiendo las ya consensuadas 17 horas lectivas semanales de forma generalizada, para el profesorado de Secundaria y Oros Cuerpos, y las 23 para Primaria.
La nota de los sindicatos añadió que en Sanidad, la Junta se ha comprometido a ofrecer las mismas condiciones que existían antes de la aplicación de la Ley 1/2012, que supuso la eliminación de las 35 horas. Se contarán los sábados y domingos como festivos en el cálculo de horas del calendario anual, y los sábados dejarán de considerarse hábiles. También se eliminará que los 30 minutos de la comida sean recuperables.
“Los tres sindicatos han estado muy vigilantes hoy en una intensa jornada de negociación, primero con el director general de Función Pública, Francisco Raedo, y luego en las mesas sectoriales de negociación de los tres sectores, para asegurar que la Junta no introdujera retrocesos en los derechos y condiciones laborales”, recogió el comunicado.
Mañana viernes se llevará la aplicación de la jornada anterior a 2012 a la Mesa General de Negociación de los Empleados Públicos de la Junta, en la que se concretará todo el contenido -ya consensuado previamente- que se detallará en un Decreto Ley que aprobará el Consejo de Gobierno.
Las tres organizaciones sindicales insistieron en que se ha dado un primer paso, al que seguirán posteriores acuerdos sobre el desarrollo normativo del nuevo Decreto Ley y la elaboración de calendarios laborales. Reiteraron que estarán “muy pendientes” las próximas semanas, para que la aplicación de las 35 horas se haga por fin, pero de manera correcta. “Es lógico que tengamos desconfianza, ya que es un compromiso de la Junta firmado en 2019 e incumplido hasta ahora, a pesar de formar parte del acuerdo marco que se alcanzó con el Gobierno autonómico sobre recuperación de derechos laborales para la legislatura 2015-2019”, precisó.
Los representantes de los empleados subrayaron que la aplicación de la jornada semanal de las 35 horas no puede ser “oportunismo electoral, sino una recuperación real que no suponga una mayor carga de trabajo para hacer lo mismo en menos tiempo, lo que implica una mayor creación de empleo”. Por ello, remarcaron la necesidad de que la Junta refuerce e incremente las plantillas, especialmente en los ámbitos de Educación, Sanidad y el socio-sanitario. En este sentido, incidieron que la Junta sigue pendiente la aprobación de las relaciones de puestos de trabajo (RPT) y del convenio del personal laboral.