El Ayuntamiento de Valladolid ha destinado 12 millones de euros para la compra de 11 autobuses articulados eléctricos Irizar, con cero emisiones. Se trata de la inversión más importante de la flota de Auvasa en los últimos años y los seis primeros vehículos comenzarán a circular los próximos días en la línea 1 Barrio España-Covaresa, que es la que registra el mayor número de viajeros. La edad media de la flota se reduce a 9,2 años, siendo la de los vehículos habituales en líneas ordinarias de 4,6 años.
El autobús Irizar ieTRAM, de 18 metros de longitud, cuenta con un moderno e innovador diseño, lo que aporta un “atractivo diferenciador” a la ciudad, a la vez que maximiza la comodidad, la accesibilidad y la seguridad para el personal de conducción y los usuarios del servicio. Los vehículos están alimentados por baterías de última generación, con una capacidad de 630 kwh de energía embarcada y doble sistema de carga, pantógrafo invertido y carga por enchufe inteligente en cocheras, fabricados por Jema Energy, empresa del Grupo Irizar. Este sistema permite la carga nocturna en cocheras, asegurando la disponibilidad para una jornada completa de operación. Además, estos vehículos están dotados de carga mediante pantógrafo, que permitirá, en el futuro, automatizar el proceso de carga en las cocheras de Auvasa.
Con una atractiva estética tranviaria, el confortable interior e innovador equipamiento de este autobús aporta una sensación de apertura y luminosidad que garantiza una gran experiencia de viaje tanto para los pasajeros como para el conductor. Tienen una capacidad para transportar hasta 105 pasajeros, con dos zonas para silla de ruedas y hasta 42 viajeros sentados, y disponen de cuatro puertas, permitiendo un acceso y tránsito fluido, contribuyendo a mejorar la velocidad comercial de la línea.
Los vehículos disponen de medidores de CO2 en el interior, así como sistema multimedia y de información con pantallas de 29 pulgadas y puertos de carga USB, junto a circuitos cerrados de televisión (CCTV) que controlan el habitáculo.
Para mejorar la seguridad y garantizar un viaje confortable, cuentan con sistemas de mejora de la visibilidad desde el puesto de conducción mediante la incorporación de cámaras retrovisores y los sistemas avanzados de ayuda a la conducción (ADAS), favoreciendo la protección de peatones y ciclistas y la maniobrabilidad del vehículo.
El precio de cada vehículo ronda el millón de euros (exactamente, 986.150 euros) y en consecuencia el conjunto de las once unidades suma la cifra de 10,8 millones de euros. A este presupuesto, se añaden los 400.000 euros de las estaciones de carga y los 591.750 euros del coste la adecuación de las cocheras de Auvasa. En total, la inversión del Ayuntamiento de Valladolid a través de Auvasa se aproxima a los 12 millones de euros (11,8 millones de euros).
El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, aseguró hoy durante la presentación de los nuevos autobuses en la Plaza de San Pablo que es una prueba del compromiso del Ayuntamiento con la movilidad sostenible y de la apuesta por el transporte público.
Vehículo histórico Pegaso
Junto con esto nuevos vehículos, Auvasa presentó el primer vehículo histórico de la compañía. Se trata de un autobús Pegaso 6038 como los que extensamente formaron parte de la flota en sus primeros años de historia y recorrieron asiduamente las calles de nuestra ciudad. Actualmente, está en proceso de restauración, en colaboración con la Asociación Castellana de Amigos del Autobús (Acabus), con la estética e imagen corporativa de la empresa en esa época.
Este vehículo forma parte de una iniciativa de Auvasa para preservar la historia de la empresa y de la movilidad en la ciudad de Valladolid, una vez que en el año 2022 se han cumplido 40 años desde la creación de la compañía. Desde la empresa se está haciendo un esfuerzo por salvaguardar el patrimonio histórico, especialmente los vehículos singulares que tanto servicio han ofrecido a la ciudad.