Los agentes de la Guardia Civil de Segovia detuvieron en la localidad de Espirdo a un prófugo de la justicia de 49 años sobre el que pesaban cinco requerimientos, varios de búsqueda, detención e ingreso en prisión, emitidos por diferentes Juzgados de Barcelona. Además, durante su detención el pasado seis de noviembre, se le imputó otro delito de atentado contra agentes de la autoridad al intentar agredirlos.
Tras llevar a cabo diferentes líneas de investigación, se pudo averiguar la posible presencia del detenido en el interior de un edificio de viviendas ocupadas de la Espirdo. Por ello, y con motivo de las requisitorias en vigor, se montó un dispositivo policial para llevar a cabo su detención, ya que era conocido por ser violento y oponer resistencia en anteriores detenciones. Se encontraba fugitivo, tras no regresar de un permiso penitenciario, contando con numerosos antecedentes policiales relacionados con delitos contra el patrimonio, robos con violencia e incluso el homicidio de un agente de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
Al percatarse de la presencia de los agentes, salió del piso con un cuchillo de grandes dimensiones en una mano y con un palo largo con un cuchillo en la punta en la otra mano. En ese momento los agentes le conminaron para que depusiese su actitud, puesto que se acercó de forma amenazante hacia ellos, esgrimiendo las armas mencionadas y amenazando con acuchillar a los presentes. Finalmente, consiguieron que tirase las armas, las cuales fueron aprehendidas, procediéndose a su detención, siendo puesto a disposición judicial y, posteriormente, ingresado en prisión.