La bodega Cepa 21, ubicada en la Ribera del Duero, en Castrillo de Duero (Valladolid), sufrió en la madrugada del sábado al domingo un “asalto” de una persona que accedió a las instalaciones y procedió a la apertura de tres depósitos de vino que produjo la pérdida de unos 60.000 litros, según confirmaron fuentes de la bodega.
Desde la compañía, que cuenta con unos 35 trabajadores, señalaron que la mayor parte de los litros derramados se enmarcan en dos de sus gamas más altas, como son Horcajo y Malabrigo, así como una pequeña cantidad de su buque insignia, como es Cepa 21.
Trasladaron que lo sucedido se encuentra en manos de las Fuerzas de Seguridad del Estado, quienes rechazaron denominar el suceso como un robo o sabotaje, sino como un “asalto”.