La octogenaria desaparecida en el embalse de Cernadilla, hallada en una zona arbolada a dos kilómetros de su casa

La encontró un guardia civil de Puebla de Sanabria, que estaba fuera de servicio, colaborando de forma particular en el dispositivo

La mujer de 80 años desaparecida ayer, cuando se encontraba con su marido junto al embalse de Cernadilla fue encontrada hoy, a las 12.00 horas, en una zona arbolada ubicada a dos kilómetros de su vivienda, en Otero de Sanabria. La mujer deambulaba en dirección contraria a su domicilio, en un paraje próximo al arroyo del Sapo, por debajo de la estacion del AVE de esa localidad, perteneciente al municipio de Palacios de Sanabria.

Durante el dispositivo de búsqueda, un Guardia Civil del destacamento de Tráfico de Puebla de Sanabria, que estaba colaborando en el dispositivo de manera particular, fuera de servicio, vio a la mujer, aunque no la identificó con la desaparecida por no coincidir la descripción.

Una consulta con la dirección del dispositivo permitiró confirmar la identidad de la mujer. El guardia civil embarcó en el helicóptero de la Unidad Aérea de León, que se dirigió hacia el lugar donde había sido avistada y la localizó de nuevo, además de auxiliarla y de avisar a los servicios sanitarios y a su familia, según relataron fuentes de la Comandancia de la Guardia Civil de Zamora.

El amplio dispositivo de búsqueda, que fue coordinado por el capitán Casas, jefe de la Compañía de Puebla de Sanabria, contó con la participación de patrullas de Seguridad Ciudadana de la provincia, unidades del Seprona, de Fiscal y Fronteras y del Subsector de Tráfico, el Puesto de Mando Avanzado, el helicóptero de la Unidad Aérea de León, los drones del Equipo Pegaso, la Usecic de Zamora, el Grupo Cinológico de Castilla y León, la Centra Operativa de Servicos, la Oficina Periférica de Comunicación, agentes medioambientales de la Junta de Castilla y León, Bomberos de Rionegro del Puente, medios de Protección Civil desplazados por el Centro Coordinador de Emergencias del 112, guardias civiles francos de servicio y numerosos vecinos de la localidad, a pie y en vehículos, según enumeraron las mismas fuentes.

 

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