La Policía Nacional y la Policía Local detuvieron en la madrugada de ayer en Valladolid a un varón de 32 años de edad y con 19 antecedentes por hechos no similares, como presunto autor de un delito contra la salud pública, al localizar en su coche 730 gramos de marihuana, y otro por quebrantar una orden de alejamiento.
Agentes de la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional, que realizaban labores de prevención de la delincuencia, observaron a un vehículo que estacionó en la zona de carga y descarga de la avenida Segovia a la una de la mañana. Debido al incumplimiento del horario establecido respecto al toque de queda, preguntaron al conductor el motivo por el que estaba circulando a esa hora y éste contestó que había tenido que abandonar su domicilio porque había discutido con su pareja sentimental.
Los funcionarios intervinientes realizaron una inspección de seguridad del vehículo percatándose de que de su interior se desprendía un fuerte olor a una sustancia, al parecer marihuana. Inmediatamente el conductor huyó corriendo del lugar y tras una larga persecución a pie, finalmente fue interceptado por los agentes actuantes en la calle Villanueva.
Tras proceder a su identificación, se comprobó que tenía en vigor una prohibición de acercarse al domicilio de un individuo y lo estaba incumpliendo, por lo que fue detenido por su implicación en estos hechos y por un delito de tráfico de drogas.
Efectivos de Policía Municipal realizaron una inspección del vehículo y encontraron en el maletero principalmente varias sustancias y dinero, los cuales fueron incautados 730 gramos de marihuana (que habrían alcanzado los 3.700 euros en el mercado ilícito), 795 euros en metálica y una navaja plateada de 10 centímetros de hoja. Además, durante el cacheo de seguridad, se le intervinieron dos trozos de hachís y una bolsita con speed, por lo que se le propuso también para sanción administrativa por estos hechos.
El arrestado fue propuesto para sanción administrativa por los agentes tras no portar la preceptiva mascarilla e incumplir las restricciones horarias establecidas actualmente en Castilla y León debido a la actual crisis sanitaria. Tras pasar a disposición de la autoridad judicial, se decretó su libertad con cargos.